domingo, 30 de agosto de 2015

CAZA DE CITAS

"Una afección está representada por la que ha sido bautizada como 'historia amena'. Nada tiene que ver ésta con la historia bien escrita y de grata lectura. Me refiero al relato histórico trivial, colindante con la denominada 'microhistoria', la cual ha llegado a convertirse en una aberración de las historiografías local, regional y sectorial"

Germán Carrera Damas 

("Clase magistral en la conmemoración de la Escuela de Historia", UCV, Caracas, 1998: 22)

NOTICIERO RETROSPECTIVO

- Demetrio Boersner. "Zaire bajo el neocolonialismo". El Nacional, Caracas, 29/05/1978.
- Miguel Otero Silva. "La chusma de Jorge Eliécer Gaitán". El Nacional, 04/05/48.
- Gral. (R) Adolfo Ramírez Torres. Comentarios: La cancillería en todas sus épocas". El Universal, Caracas, 08/05/76.
- Cnel. Luis Avendaño Fernández:"(CSJ) Anulan resolución de Defensa de pasar a reiro a un coronel". El Universal, 19/11/83.

NECESARIA PRECISIÓN



Manual indispensable

Luis Barragán

Recientemente, Luis Alberto Buttó ha aportado una estupenda, necesaria y oportuna brújula: “Civiles y militares. Manual indispensable” (Negro Sobre Blanco, Caracas, 2015). El calificado académico  asume – así -  una importante responsabilidad de orientación y discusión sobre una materia tan crucial, aunque frecuentemente evadida, para el novicio y el ya experimentado investigador que intentan la adecuada interpretación de unas relaciones difíciles, procurando la documentación y al análisis de un problemario destinado a estructurar una opinión alternativa (sólidamente fundada para que sea – además – relevante y pertinente),  epistémica y metodológicamente convincente, refutable como lo exige todo conocimiento científico (17, 32, 42, 68, 79, 81 s.,  109 s.).  Por ello, insiste, en el enfoque multidisciplinario, interdisciplinario y transdisciplinario para alcanzar un lenguaje común mínimo, la interpelación eficaz e, incluso, una justa postura frente a las teorías tradicionales y las esnobistas (82 s., 105).

Establecidos los parámetros esenciales para una accesible y grata disertación, el breviario conquista su hondura a través de una tarea central, como es la de “evidenciar la intervención de los miliares en política”, propiciado por el  monopolio de la coerción y la fuerza legal (78, 101).  Hábito harto conocido en este lado del mundo,  nos remite al universo de las relaciones entre civiles y militares de un superior desafío, complejidad y entidad que la simple yunta cívico-militar, denominación en boga capaz de enmascarar otras que  retratan – a nuestro juicio – una regresión a la premodernidad.

Relaciones civiles y militares que se concretan entre los oficiales superiores y la élite civil gobernante, derivando en asuntos no menos específicos: la intervención militar en política, el control civil democrático, la concepción y operación del sector defensa (105). La clave reside en la (in) subordinación de un sector respecto al otro,  concluyendo que el  “control civil significa, entre otras cosas, [la] plena autonomía  del sector civil para formular las políticas del Estado en materia de defensa nacional”, precisando que ha sido de penetración partidista en el socialismo real y también que el analista suele deslumbrarse – creyéndolo vigente – por el mero cumplimiento de las formalidades jurídicas (61, 65, 69), aunque la experiencia pretoriana tienda a sincerarse como un estadio definitivo de militarización.

Valga acotar, control civil que mejor ha realizado la democracia liberal representativa  y, habida cuenta que su perfeccionamiento constituye una bandera atractiva y poderosa, no siempre ocurre, pues, la mentada superación en Venezuela se convirtió en un monumental retroceso que ahora  trastocan sus fundamentos en una urgente reivindicación.  Ella es víctima de una “caterva de adjetivos que el pensamiento posmoderno vacuamente pretende endilgarle”, observa con acierto Buttó (77).

Gana en exactitud el control civil que nos remite a un subgrupo de oficiales de comando, con poder de fuego acumulado, fuera de toda representación política debido a la sensata restricción de la ciudadanía que recae sobre todos los miembros de la entidad castrense, supeditado al de los civiles con responsabilidades de gobierno. Significa negar la autonomía militar, terreno fértil para el pretorianismo (34, 110), y la misma confusión de la institución armada con el Estado del cual es un instrumento u órgano-herramienta decidido política y estratégicamente, como corajuda, contundente e inequívocamente asevera el autor (60, 98 s.).

Atina al distinguir entre la coerción y fuerza en el marco del Estado de Derecho, respecto a la violencia (23), susceptible de llegar a la brutalidad. Ocurre algo semejante al diferenciar entre seguridad y defensa, estableciendo roles (41), aclarándonos en qué consiste la colonización militar (25), el golpe de Estado (44 ss., 108) y las crisis de gobernabilidad, institucional y de representación (75 ss.).

Casualidad alguna fue la de iniciar el ensayo refiriéndose al papel que jugó Narcís Serra i Serra a lo largo de la década española de los ochenta del XX, por cierto, recordándonos a otro reformador militar como Manuel Azaña al advenir la II República, enfatizando la obligación que tiene todo dirigente político de estudiar realidades que no debe extrañar, como la castrense, impuesta la necesidad de informarse – incluso – en términos operacionales (107 ss.).  Queda pendiente la discusión en torno a la creciente desespecialización de la dirigencia venezolana que, apuntadas las excepciones de rigor, ofrece un dramático contraste con lo que fue el oficio cotidiano en décadas anteriores.

Varias veces hemos constatado las flaquezas del debate constituyente de 1999,  en ésta y en otras materias, coincidiendo en la “inexcusable demostración de la supina ignorancia” que los diarios de debates arrojan respecto al alcance real de las competencias de los sectores civil y militar (60).  Tarea próxima es la de propiciar un futuro y decisivo debate sobre la materia militar en el parlamento que viene, faltando poco para que caduque el actual, como modesta e infructuosamente quisimos hacer en 2010 (http://www.dailymotion.com/video/xidikx_copei-trabaja-en-una-serie-de-leyes-que-regularian-el-ambito_news).

La academia ha dado muestras de responsabilidad, como lo comprobamos con Buttó, expresión de una vigente escuela de pensamiento que tuvo en Domingo Irwin el innegable maestro e inspirador.  Ensayo con carácter de propuesta, es el “resultado de cierta angustia intelectual que me ha atosigado en los años dedicados al tema” (106), materializado ahora en una edición heroica – vistas las actuales circunstancia económicas -  en la que, permitiéndonos la observación quizá ociosa, por una parte, el autor emplea recurrentes términos coloquiales (a la chita callando, troche y moche, light, sardina a la brasa, caer de maduro, alturas del partido), ironizando – además – con sinónimos que le sirven para la caracterización de determinados aspectos; y, por otra, desmintiendo cualquier tufo “reaccionario”, evoca brevemente las letras de Alí Primera y Silvio Rodríguez, cuando no cita a Moisés Moleiro y a Vladimir Lenin.

Fuente:
http://www.noticierodigital.com/2015/08/manual-indispensable/
http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=1104377

LOS OTROS CAMINOS



Automovilismo, vialidad y modernización 
(y Estado de Excepción)

Luis Barragán

Gracias a una formidable alianza de la Academia Nacional de la Historia y la Fundación del Banco del Caribe, tenemos títulos como el de José Alberto Olivar: "Automovilismo, vialidad y modernización" de José Alberto Olivar (Caracas, 2014), ganador del Premio de Historia Rafael María Baralt. Por cierto, iniciativa que no debe pasar inadvertida en un país tan urgido de memoria, susceptible de cualesquiera emboscadas de confusión y olvido con caras consecuencias – precisamente – históricas.

El autor considera la creación de la Comisión y del Plan Nacional de Vialidad que contextualizó,  ordenó e impulsó obras de una enorme relevancia, inscrita en una preocupación constante desde que el Estado Nacional se hizo tal, con Juan Vicente Gómez,  hallando continuidad en los sucesivos gobiernos que echaron las bases de la otra Venezuela insospechada a la luz (o la sombra) de las incontables guerras y escaramuzas civiles de un siglo aún más lejano. Todavía, los venezolanos no logramos imaginar cuán incomunicado estaba nuestro territorio hasta que, a principios y mediados del XX, fue asumida una responsabilidad varias veces postergada, con precursoras carreteras y líneas férreas que obligaron a toda una red vial apuntalada por la renta petrolera.

En líneas generales, la obra versa sobre la inversión pública – incluso – como una panacea del desarrollo, al finalizar y principiar las décadas de los ’40 y ’50, ponderando su real incidencia económica. Concreta sus observaciones con la expansión de la red en la dictadura perezjimenista, ejemplificada por la autopista Caracas-La Guaira, la Carretera Panamericana, el sistema vial de Caracas y del centro del país, el puente sobre el Lago de Maracaibo, el plan ferroviario nacional.

Un título que rompe con el acostumbrado temario político y, a la vez, con nuestro tedio lector, nos permite apuntar a las generaciones venezolanas que, por un lado,  creen que la infraestructura vial es de una muy remota data, y, por el otro, las más recientes, no adivinan la calidad de vida que alcanzamos, ya habituadas a un deterioro que suponen secular. Por lo demás, rindiéndole los dividendos políticos del caso, hay quienes juran que todo el país urbano lo concibió y levantó enteramente Pérez Jiménez, aunque – por ejemplo -   la Ciudad Universitaria de Caracas fue concebida y planificada desde los tiempos de Medina Angarita, principiando con toda la complejidad técnica y administrativa del proyecto, o  la autopista Caracas-La Guaira fue anunciada en el primer mensaje presidencial de Gallegos. Por lo demás, téngase en cuenta que el Estado luego atendía e invertía en otras áreas (educación, salud, etc.), igualmente condicionado por la discusión, a veces acalorada, que iba más allá del parlamento: ésta sola circunstancia nos enseña las facilidades con las que contó un dictador que decidía inconsultamente sus inversiones.

Todavía joven, Olivar es un calificado historiador que promete una obra seguramente decisiva para los venideros años. Por lo menos, tenemos la fortuna de leerlo – digamos – tempranamente.

Estado de Excepción

Una masiva perturbación y dislocación ha provocado el decreto – por ahora – fronterizo. Inútil tarea, pues son otras las causas decisivas de una crisis enteramente nacional. Digan lo que digan, es necesario disculparse con los colombianos, porque no merecían semejantes atropellos de los que ya vivimos en carne propia los venezolanos.

Fuente:
http://www.diariocontraste.com/automovilismo-vialidad-y-modernizacion-y-estado-de-excepcion-por-luis-barragan-luisbarraganj/ 

HELADURA HIRVIENTE



De la Guerra Fría 
(y Estado de Excepción)

Luis Barragán

Días atrás, Nicolás Maduro señaló que Álvaro Uribe se quedó pegado a la Guerra Fría de 1715 (https://www.youtube.com/watch?v=E_JKBxgeNpk), evidentemente equivocado. Sin embargo, frente a aquellos que arguyen el deliberado yerro presidencial que cumple frecuentemente con el objetivo de una masiva confusión, es tiempo de asegurar que padecemos de la olímpica ignorancia de gobernantes que, así, se burlan de los gobernados.

La alusión fue propicia para retomar y completar una compilación publicada a fines de 2014, presta para la coincidencia y la discrepancia: “Venezuela y la Guerra Fría”, dirigida por Alejandro Cardozo Uzcátegui (Nuevos Aires – Universidad Simón Bolívar – Consorcio Geo, Caracas). Concursando Catalina Bank, Juan Acuña, José Alberto Olivar, Domingo Irwin, Luis Alberto Buttó, Otoniel Morales, Claudio Alberto Briceño Monzón y Carlos E. Hernández Gonzalez,    la Guerra Fría brilla en el  siglo pasado, particularizándola a través del petróleo, la Doctrina de Seguridad Nacional, la cultura, sucesos como El Porteñazo, Estados Unidos, Unión Soviética, la geopolítica latinoamericana, el equipamiento militar.

Por fortuna, la academia está respondiendo en torno a aquellos asuntos que urgen de la claridad actualizadora, evitándonos caer en las habituales emboscadas de un régimen que irresponsablemente versiona el pasado común.  Sin embargo, por lo pronto, deseamos acotar un par de observaciones muy particulares que la obra en cuestión suscita.

Por una parte, luce oportuna la referencia que Briceño Monzón hace, en el contexto de la geopolítica latinoamericana durante la Guerra Fría,  sobre Forbes Burnham, mandatario guyanés del que escasamente sabía Chávez Frías. En los ochenta del XX, Venezuela gozaba de la credibilidad que le concedía su política caribeña y el impulso dado al Nuevo Orden Económico Internacional,  por lo que no bastaba el esfuerzo de victimización del vecino país, cuya crisis hallaba en el diferendo territorial una magnífica válvula de escape (245 ss.).

La sola circunstancia apuntada, contrasta con el desconocimiento exhibido por el grueso de los parlamentarios oficialistas que, con motivo del único debate que se ha dado sobre el Esequibo,  divagaron apelando al libreto que literalmente empuñaron para la inevitable derrota que los argumentos de la oposición les propinaron. Desde el más alto nivel del gobierno, no permea una información más sobria y consistente, porque – empezando por el ocupante de Miraflores – le da igual disertar en torno a la guerra friolenta en el paleolítico, cuyo mejor perfomance es la improvisación.

Por otra, Irwin escruta El Porteñazo ofreciendo una tesis tan innovadora como documentalmente fundada, reparando en la ausencia de civiles especializados y de alta calificación en el área de de defensa y seguridad, no sólo en el otrora ministerio de la Defensa, sino en las comisiones afines del ya extinto Congreso Nacional (117 ss.).  Indispensable a los efectos del control civil, no disponemos de información actualizada al respecto:  ni siquiera de la propia Asamblea Nacional y de su elenco de asesores, aunque por la calidad de las intervenciones oficialistas en la cámara dudamos que  cuenten con un personal suficientemente adecuado, por lo menos, para orientarlos en el propio lenguaje empleado.

La demanda sigue en pie, habida cuenta de la transición democrática pendiente. Se dirá, por lo menos, que en tiempos pasados la prensa independiente exhibía la opinión de algunos especialistas en seguridad y defensa, más o menos asiduos como los expertos petroleros, criminólogos, geógrafos, juristas o médicos que solían dar una cierta e indispensable orientación, pero ahora – en la era de la censura y el bloqueo informativo – los medios impresos y digitales  exponen a muy pocos voceros de una vocación pública que no entorpece el desempeño privado.

Estado de Excepción

El Estado de Excepción no es otra cosa que eso: la excepción. No obstante, apenas se decretó en la zona fronteriza, no pocos diputados del oficialismo lo reclamaron para todo el territorio nacional, como un gesto de solidaridad automática con Nicolás Maduro para evitar cualquier duda o ambigüedad en el pesado y feroz juego interno del partido, a veces razonado débilmente como parte de una cierta proeza de liberación en lo que suponen toda una epopeya: la ya tristemente célebre OLP.

Fuente:
http://opinionynoticias.com/opinionnacional/23570-de-la-guerra-fria-y-estado-de-excepcion 

DESENREDO

Evangelio Dominical: No al ritualismo
José Martínez de Toda, S.J.

Comentario dialogado al Evangelio que se proclama el vigésimo segundo Domingo del Tiempo Ordinario, ciclo B, correspondiente al domingo 30 agosto 2015. La lectura es tomada del Evangelio según San Marcos 7, 1-8. 14-15. 21-23
"Me honran con los labios; pero su corazón está lejos de mí"
¿Cuál era este problema de 'no lavarse las manos' antes de comer?
Los fariseos acostumbraban a lavarse las manos antes y durante las comidas. Pero no era sólo una medida higiénica. Ellos querían hacer como los sacerdotes, que estaban obligados a estos lavatorios cuando se acercaban al altar. (Éxodo 30:18-21 y 40:31). Era una manera de demostrar su devoción a Dios – y de tener como un marcador que los diferenciara de sus vecinos paganos, considerándose los predilectos de Dios y «los santos». Por ejemplo:
La mayoría de las casas de Jerusalén tenían un espacio destinado a los baños y lavatorios rituales.
Usaban agua de lluvia, que no fuera transportada.
Preferían recipientes de metal, piedra y vidrio, porque no son materiales absorbentes, y así no necesitan de la limpieza ritual después de ser usados.
"Y volviendo de la plaza, si no se lavaren, no comen."
Lavaban la ropa u otros objetos que habían tenido contacto con animales (Levítico 11:28-38).
No mezclaban "carne" y "leche" (Éxodo 23:19).
Otros ejemplos de ritualismo y rigorismo: 39 normas para el sábado y 613 mandatos derivados de la Ley Mosaica (Shökel, Lc 6, 1-5 y Lc 6, 6-11). Fueron acusados los discípulos de triturar espigas en sábado para comerlas, y Jesús fue acusado de curar en sábado
Los fariseos y los maestros de la ley se dieron cuenta de que algunos discípulos de Jesús comían sin haberse lavado las manos, y le preguntan a Jesús:
"¿Por qué tus discípulos no siguen la tradición de los ancianos, sino que comen con las manos impuras?"
¿Qué responde Jesús?
Él los llama "hipócritas". En la literatura clásica griega, la palabra "hipócrita" (hypokriton) se aplica a los que actúan en el escenario de un teatro. Y Jesús continúa:
"Enseñan como doctrinas de Dios lo que son mandamientos de hombres" (vv. 6b-7).
Es decir, los fariseos habían inventado cosas que no venían de Dios.
Ya lo advirtió Isaías: "El día de ayuno buscáis vuestro interés; ayunáis entre riñas y disputas, dando puñetazos sin piedad." (Is 58, 3b-4).
Y Jesús, para desenredar los errores de los fariseos, hace dos aclaratorias.
1ª aclaratoria: Recomienda no actuar por rutina y costumbre, sino pensar por qué se hacen las cosas. Hay una experiencia muy conocida hecha con unos monos.
Entonces, los científicos sustituyeron uno de los monos. La primera cosa que hizo el nuevo mono fue comenzar a subir la escalera para comer cambures, pero fue bajado rápidamente por los otros, quienes además le pegaron. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo ya no subió más la escalera.
Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo. El primer sustituto participó con entusiasmo de la paliza al novato. Un tercero fue cambiado, y se repitió el hecho. El cuarto y, finalmente, el último de los veteranos fue sustituido.
Entonces se vio que los monos, aun cuando nunca recibieron un baño de agua fría, continuaban golpeando a quien intentase llegar a los cambures o bananos. Si les preguntaran por qué pegaban a quien intentase subir la escalera, con certeza la respuesta sería: "No sé, las cosas siempre se han hecho así, aquí..." >
A veces somos como esos monos. Hacemos muchas cosas simplemente porque así se han hecho siempre, sin preguntarnos por qué lo hacemos así.
"Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio" (Albert Einstein).
Jesús dice: Los fariseos le daban más importancia a las tradiciones de los hombres que a los mandatos de Dios (o la Torá). Lo que realmente importa es hacer la voluntad de Dios, aumentar nuestra fe, esperanza y caridad.
Entonces, ¿Jesús condena las tradiciones, como inventos humanos?
Jesús no condena toda tradición. Condena el ponerlas al mismo nivel o por encima de lo mandado por Dios. Hemos heredado procesiones, novenas, celebraciones, fiestas. Todas son hermosas y buenas, pero... no hay que confundirlas con lo esencial.
Todas esas tradiciones son medios para un fin.
Y el fin es dar gloria a Dios, y formar la iglesia de Cristo, que es vivir juntos el amor y compartirlo con los hermanos. Somos una sola familia, unida en lo esencial que es buscar la salvación para todos. El fin siempre será caminar juntos hacia Dios.
Jesús nos aclara qué es lo importante y qué lo secundario.
¿Cuál es la segunda aclaratoria?
Jesús añade: "Lo que hace al hombre malo es lo que viene del corazón".
Lo que viene de fuera, no afecta al hombre, no lo hace malo, no lo mancha.
Lo malo es lo que viene de su corazón y consiente a ello. Es decir, los malos pensamientos, la inmoralidad sexual, los robos, el narco, la droga, los asesinatos, la avaricia, la corrupción, los adulterios, la codicia, las maldades, el engaño, los vicios, la envidia, los chismes, el orgullo, la falta de juicio. Todas estas cosas malas salen de dentro y hacen impuro al hombre.
Lo demás es pura hipocresía: De nada sirve vestirse elegantemente e ir así a la Iglesia, si la conducta es mala, perversa e impura. "Aunque el mono se vista de seda, mono se queda". Lo que importa es purificar el interior. De nada sirve rezar muchas oraciones, asistir a muchas procesiones, si mis obras no siguen los mandatos de Dios.
Jesús viene a recordarnos que lo importante no es lo que dicen los labios, sino lo que dice el corazón.

Fuente: http://radioevangelizacion.org/noticia/evangelio-dominical-no-al-ritualismo

Ilustración: Sam Vanni.

LAVADURA Y MANIPULACIÓN

NOTITARDE, Valencia, 30 de agosto de 2015
“Caminando con Cristo”
Lo puro y lo impuro (Mc. 7,1-8.14-15.21-23)
Pbro. Lic. Joel de Jesús Núñez Flautes

El evangelio de este domingo nos presenta la escena de unos fariseos que preguntan a Jesús el porqué sus discípulos comen sin lavarse o purificarse las manos.
Los fariseos eran personas muy ritualistas, fanáticos que distorsionaban el verdadero sentido de la Palabra de Dios. Entre tantos rituales que tenían estaba el lavarse las manos y los brazos ritualmente, exageradamente, y al ver que los discípulos de Jesús no hacen este rito lo cuestionan sobre el asunto. No se trata aquí de un caso de higiene (como podemos hacer nosotros antes de comer), se trataba de un rito largo antes de comer y al mismo tiempo sin sentido, que en nada afecta a los mandamientos de Dios.
Para los fariseos este acto significaba estar puro ritualmente y se había convertido en una tradición intocable. Las palabras de Jesús a la interrogante de sus interlocutores son categóricas: “Bien profetizó Isaías de ustedes, hipócritas: Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. El culto que me dan está vacío, porque la doctrinan que enseñan son preceptos humanos”. Jesús condena el tradicionalismo farisaico que mata la ley de Dios.

En la segunda parte del evangelio, después que Jesús echa en cara a los fariseos el cómo manipulan la Palabra de Dios con tradiciones humanas, habla acerca de lo que es puro e impuro a los ojos de Dios, no en sentido ritual (los fariseos prohibían ciertos alimentos como por ejemplo carne de puerco, porque los consideraban impuro), sino moral y personal; es decir, en lo que respecta a la conciencia del hombre creyente frente a Dios. Jesús dice que lo que entra por la boca (los alimentos) no hace impuro al hombre, sino lo que sale de su corazón (malos deseos y malas acciones).

IDA Y RETORNO: Oración, conciencia y acción por Venezuela.

Fotografías: Desaparece y reaparece en la red de redes. Es el rostro de Jesús, publicado años atrás de acuerdo a los especialistas. No constituye herejía alguno imaginarlo de una forma diferente a la versión bizantina, por ejemplo. La "pinta" del Salvador no es decisiva.

jueves, 27 de agosto de 2015

ALGO MÁS QUE UN RUIDOSO TUBO DE ESCAPE



El  cacharro socialista es el que no anda

“El Estado de Excepción en la frontera tachirense es como un gigantesco operativo de la OLP, cuyos resultados no se verán”, aseveró el diputado Luis Barragán de Vente-Venezuela.

“Al régimen le importa poco generar crisis internacionales, atacando las consecuencias en lugar de las causas. Así como se ha agravado la inseguridad personal con las tales OLP, algo peor que la suma de los viejos ‘Plan Unión’, fracasado el ‘Patria Segura’,  ocurre igual con la escasez de los insumos básicos, la inflación y el bachaqueo. Se supone que al atacar el contrabando, único pretexto del gobierno, a la semana la situación del país mejoraría, pero no ha ocurrido porque es el socialismo parasitario, campamental e improductivo el que se tiene en pie, urgido de cambiar”.

Finalmente acotó: “Si no fuese por la trágica realidad, se diría que en la frontera sólo hay un ruidoso tubo de escape, pero es el cacharro el que no anda: un modelo  harto fracasado necesario de denunciar y de superar. Para los parlamentarios en ejercicio y los aspirantes a la elección de Vente-Venezuela, no ha habido receso. Seguimos en la lucha”.